Marmita fija E145L Bartscher | 145 Litros | Calor Indirecto

La marmita eléctrica fija E145L profesional de Bartscher es un equipo de cocción de alta capacidad con una cuba de 145 litros, construida íntegramente en acero inoxidable AISI-304, que asegura durabilidad sin juntas ni soldaduras internas. Para uso industrial en colectividades.

Características generales de la marmita fija E145L de Bartscher

La marmita eléctrica del modelo E destaca por estar fabricada con acero inoxidable en su totalidad, con control automático del nivel de agua en la capa intermedia y calentamiento eléctrico mediante resistencias blindadas "Incoloy 800" de una aleación especial . A continuación, se detallan las más relevantes:

• Amplia cuba con capacidad para 145 litros.
• Fabricación integral en acero inoxidable AISI-304.
• Control automático del nivel de agua.
• Calentamiento eléctrico mediante resistencias blindadas "Incoloy 800" de una aleación especial.
• Fácil acceso frontal para mantenimiento y reparaciones.
• Desconexión automática en caso de avería.
• Ajuste de la altura que va desde los 850 mm hasta los 900 mm.

Especificaciones técnicas de la marmita E145L de Bartscher

Las especificaciones técnicas de la marmita eléctrica fija Bartscher E revelan un diseño eficiente y gran rendimiento:

• Capacidad de la cuba: 145 litros (capacidad real de 135 litros)
• Altura de la marmita: 900 mm
• Potencia eléctrica: 18 kW 
• Voltaje: 400 v./50 hz
• Dimensiones:
  • Ancho: 800 mm 
  • Fondo: 900 mm
  • Alto: 900 mm
• Peso bruto: 155 kg

Equipamiento opcional de la marmita fija eléctrica E145L de Bartscher

Esta marmita eléctrica de Bartscher es un modelo al que se le puede añadir equipamiento extra. A continuación, se detallan los componentes opcionales, consúltanos para información sobre precios y acabados. 

• Batería mezcladora para agua fría y caliente.
• Marmita para calentamiento por vapor.

¿Cuál es la diferencia entre el calor directo e indirecto en una marmita?

La diferencia entre el calor directo e indirecto en una marmita radica en cómo se transfiere el calor al alimento:

• Calor directo: La fuente de calor está en contacto directo con la marmita, calentando rápidamente el fondo. Esto es efectivo para cocinar a altas temperaturas pero puede aumentar el riesgo de quemar los alimentos.
• Calor indirecto: Utiliza un medio intermediario, como agua o vapor, entre la fuente de calor y la marmita, permitiendo una distribución del calor más uniforme y suave. Es ideal para cocciones lentas y alimentos delicados, reduciendo el riesgo de quemaduras.